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El papa Francisco expresó su preocupación por la situación en Venezuela durante el ángelus que rezó este domingo ante miles de fieles en la plaza de San Pedro. Tras comentar el evangelio del día, el pontífice hizo un llamado a la paz en Medio Oriente, Myanmar y, finalmente, en Venezuela.
Francisco describió a Venezuela como un país que «atraviesa una situación crítica» y pidió que todas las partes involucradas busquen la verdad, actúen con moderación, eviten la violencia y resuelvan sus diferencias a través del diálogo. Aunque no se pronunció a favor ni en contra del Gobierno o la oposición, enfatizó que se debe considerar el verdadero bien del pueblo por encima de los intereses partidistas.
Al concluir su intervención, el papa Francisco solicitó la intercesión de figuras religiosas queridas por los venezolanos, diciendo: «Encomendemos este país a la intercesión de Nuestra Señora de Coromoto, tan querida y venerada por los venezolanos, y a la oración del Beato José Gregorio Hernández, cuya figura nos une a todos».
