Rebecca Kiessling es abogada, oradora internacional en contra del aborto, y fundadora y presidenta de la fundación pro-vida “Save The 1” (Salve a Uno).
Dicha institución está conformada por 800 personas concebidas por violación y madres que quedaron embarazadas por violación que no están a favor del aborto.
Kiessling fue concebida cuando un violador en serie secuestró a su madre biológica y la violó brutalmente. Si bien ella se acercó a dos clínicas para poder abortar, desistió en el último minuto pues le preocupaba su salud, pues en esos momentos eran ilegales.
Rebecca fue puesta en adopcion tiempo después de nacer. A los 18 años de edad se enteró de la brutal historia de su concepción. En ese momento vio cómo ella fue considerada en su momento como basura, o algo desechable, y esto la marcó.
Desde entonces estuvo en desacuerdo con el aborto, en todas las ocasiones. Para ella el aborto es brutal en sí, y considera que muchas personas a favor del aborto lo hacen por pura postura.
Tiempo después conoció a su madre biológica con quien entabló una relación de perdón, reconciliación y amor. Irónicamente, al final de todo, sus hermanastros se distanciaron de su madre, y es Kiessling, la hija que quiso abortar, la que la cuida.
Al fundar la organización “Save the 1”, ella se propuso hablar por los niños abortados por causa de violación. Sobre todo, para que las personas comprendan que un violador no es el creador de un bebé, sino Dios.
Asimismo, su enfoque también está dirigido a las instituciones legales y a los políticos. Brinda información y formación para aquellas personas que tienen en sus manos la capacidad de cambiar las leyes de un país.
En general, se quiere educar a las personas para que no se vea al niño como un problema, sino que por ley y sociedad este sea aceptado como una persona, sin excepciones.
16 años cuestionándolo todo, investigación y crítica política sin censura.