Sin Secretos / Angélica García Muñoz
El gobierno de Puebla tiene en la mira un proyecto que no deja indiferente a nadie: La carretera que pasaría, uno de sus tramos, a 6 kilómetros de la boca del volcán Popocatépetl, ese gigante que sigue rugiendo.
La carretera en cuestión comprende, de acuerdo al proyecto, de Santiago Xalizintla, por el lado de Puebla a Amecameca (del lado del Estado de México).
Rebeca Bañuelos Guadarrama, secretaria de Medio Ambiente y Desarrollo Sustentable, salió a dar la cara y aseguró que se analiza si es viable o no.
‘No hemos tocado ni un metro’, dijo en entrevista, dejando claro que por ahora todo está en estudios, con una licitación lanzada el pasado 23 de enero de este año para evaluar el impacto ambiental.
Pero aquí viene el dato: Mientras el proyecto está en espera, el gobierno del Estado de México ya puso manos a la obra en su tramo, aunque no se sabe que está haciendo.
Bañuelos explicó que el cerebro detrás del proyecto es José Manuel Contreras, titular de Infraestructura, pero ella, desde su trinchera, tiene la lupa puesta en el medio ambiente. “Analizamos todo, posibilidades y riesgos”, afirmó, dejando el balón en la cancha de SEMARNAT, que como autoridad federal decidirá si este trazo en la reserva natural del volcán ve la luz o se queda en el cajón.
La funcionaria también adelantó que, si SEMARNAT da el sí, la carretera se hará bajo las reglas que ellos pongan. Mientras tanto, un respiro para los poblanos: los caminos de evacuación que ya existen están recibiendo mantenimiento. ¿Será este proyecto una salida segura o un riesgo innecesario tan cerca del Popo? Por ahora, la pelota está en el aire, y los ojos de quienes viven bajo la sombra del coloso se mantendrán atentos a lo que acontezca en los próximos meses”.
Habrá que ver si habrá los recursos económicos para realizar la obra, claro una vez que fuera aprobada por las instancias oficiales.

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