La Asunción de María, la esperanza de nuestra propia Resurrección.

Angélica García Muñoz / Diariosinsecretos.com

Puebla,Pue.- La más solemne fiesta que celebra la Iglesia Católica de María es la de la Asunción de la Madre de Dios.
El dogma de fe fue promulgado por el Papa Pío XII el 01 de noviembre de 1950.
Venerada en Oriente desde el siglo XVII y en el siglo XVIII en Europa.
La celebración – 15 de Agosto- de la Asunción de María es la esperanza de nuestra propia Resurrección.
El festejo es un reconocimiento a la Virgen inmaculada, por su grandeza y perfección, por sus méritos y sus virtudes.
La toda llena de gracia que nació sin el pecado original, vivió llena de humildad y llegada a la plenitud de la perfección del amor, murió por amor en completo éxtasis, disfrutando el esplendor del Cielo, y dormitó, para ascender al Cielo en cuerpo y alma, porque así lo quiso Dios conceder a la sierva de siervas, a la mujer que pisa la cabeza de la serpiente, según la Apocalipsis, La mujer vestida de sol, con la luna bajo sus pies y una corona de 12 estrellas, quien protegió a su hijo con toda su perfección y nos sigue protegiendo a toda la Humanidad.