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Ciudad de México.- la noticia de que el obispo emérito de Ecatepec, Onésimo Cepeda Silva, se registrará como precandidato a diputado Local por el distrito 21 en Ecatepec – donde fue el guía espiritual de la Diócesis por muchos años- ha causado revuelo en la clase política local y nacional, y polémica en los medios eclesiásticos, y fieles católicos.
La dimisión se ajustó al canon 401, del Código de Derecho Canónico, en el cual se estipula que todo obispo debe presentar su renuncia al cumplir 75 años de edad
El prelado sostiene que ya no ejerce como religioso por lo que tiene todos sus derechos para votar y ser votado.
En el 2012, el Papa Benedicto XVI, le concedió su renuncia, a los 75 años edad. Hoy, a sus 84 años de edad el prelado ha decidido incursionar a la política-partidista, con una candidatura por Fuerza México, de reciente creación.
Fue dirigente nacional del Movimiento de Renovación Carismática, y opositor a la Teología de la Liberación, y en 1995, el Papa Juan Pablo II, lo nombró primer obispo de Ecatepec, donde edificó una catedral, e impulsó obras sociales.
Durante su vida sacerdotal, Onésimo Cepeda, tuvo relaciones con políticos del PRU y del PAN, así como con grupos empresariales.

16 años cuestionándolo todo, investigación y crítica política sin censura.
