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ESPECIAL / Dra. Margarita Tlapa Almonte
La cultura de la Ciudad Milenaria de Cholula como se nombra y sus múltiples manifestaciones se expresan a través de tradiciones, estas son la riqueza histórica de una herencia que, por ende, es muy rica y diversa, pues mezcla elementos de diversos periodos, desde aspectos: el prehispánico, el colonial, hasta el moderno.
Los cholultecas que tenemos la oportunidad de reproducir y de vivir estas tradiciones específicamente las festividades religiosas que es lo que caracteriza a Cholula desde la época prehispánica por ser el centro religioso y ceremonial de Mesoamérica, sabemos que es lo que nos da identidad, al mismo tiempo que nos permiten descubrir la esencia de Cholula y su rico pasado que se niega a morir.
En Cholula existen también muchas tradiciones que hemos adoptado y se han adaptado desde la Colonia, de alguna manera han enriquecido nuestra cultura, pero esto no significa que perdimos las costumbres propias, por el contrario, sabemos que estas representan nuestras raíces, nuestra cultura y nuestro vínculo con un pasado lleno de historia, sentimiento y amor hacia esta maravillosa Ciudad Sagrada. Sin embargo, es importante mencionar que acorde a la época en que vivimos muchas de estas tradiciones se ha cambiado la esencia, porque se ha perdido su significado, las nuevas generaciones lo desconocen y las tradiciones se han convertido en festividades que solo se realizan, se involucran y utilizan cholultecas que no son parte de la tradición, sumado a esto las han convertido en comerciales. Esto como resultado de no aceptar, preguntar la tradición oral (conocimiento oral), por la marginación de sus portadores de mayor edad y conocimiento. Se realizan festividades religiosas y se olvidan por completo de su verdadero significado, mismo que es importante rescatar, conocer para preservar el legado histórico que nos han heredado generaciones pasadas, para así compartirlo con las nuevas generaciones que tienen derecho a conocerlo pero a través del conocimiento y no solo de realización o hacer la tradición sin la memoria la colectiva de la comunidad y colectividad en la que se encuentra depositada la tradición oral, realizando fiestas a criterio individual.
Las tradiciones son importantes y fundamentales porque son legados o herencias de nuestros antepasados que se conservan a lo largo del tiempo, porque se transmiten de generación en generación, en el caso de los barrios de Cholula los señores tiachcas y principales, como los principales portadores de la memoria colectiva y los saberes quienes a través de su experiencia, antigüedad de realizar un cargo (mayordomía) y la transmisión oral, educan a las nuevas generaciones fomentando y promoviendo la conservación de la tradición, la pertenencia, el vínculo con la comunidad, prácticas, actividades, mitos, costumbres, creencias, normas, conductas, etc., como parte de la cultura de los barrios. Los portadores transmiten esta esencia, el acervo histórico que es la herencia de siglos de continuidad, de significado real o propio que hace vivir hasta la actualidad a los barrios, para dar identidad propia y estilo de vida. Manifestándose como expresiones culturales del ser humano y la vida del barrio de manera permanente a través del tiempo.
En Cholula como en todo México, la tradición tiene raíces prehispánicas y cristianas con aportes diversos de ambas culturas, en la que se trata de evitar sustituir atributos esenciales o renegar de ellos, la finalidad es conservar la herencia compartida en lo colectivo convirtiéndose así en lo que es nuestro patrimonio cultural, el cual está conformado por bienes materiales como sus templos, esculturas, pinturas; además de un patrimonio cultural inmaterial en el que se encuentra la tradición oral a través de relatos, narraciones, cuentos, saberes, prácticas religiosas (ceremonias, ofrendas, rituales), música, gastronomía, espacios y tiempos.
Los portadores de estas tradiciones son personas con un intuitivo peso cultural capaz de haber generado y logrado la reproducción a lo largo del tiempo, para dar identidad, originalidad y valor a cada tradición. Son personas que han transmitido y transmiten la experiencia y conocimiento de generación en generación, conocimiento y saberes que se atesoran, valoran y cultivan a través de emociones y sentimientos colectivos, poseen características y experiencias económicas y sociales. Conservan, diversifican y jerarquizan ciclos festivos, conducen el sistema de cargos, consensan la experiencia por antigüedad de su cargo, conocimiento oral. Con el único fin de preservar la tradición, transmitirla, reproducirla, de padres a hijos a través del tiempo, para participar culturalmente y hacer sobrevivir el pasado y el presente para el futuro, actualizándose en la memoria colectiva de conocimientos y procedimientos que no están registrados o escritos en su gran mayoría, sin embargo, dan apego a lugares, vivencias, convivencias y principalmente cohesión social, vivir colectivamente sin pensar en la individualidad.
Las tradiciones de los barrios, su historia, sus portadores, y los hechos (las fiestas) sirvieron y sirven para agruparse y consolidarse, fortalecer sus costumbres y formas de ser, forman parte de las características socioculturales que permiten identificar cada barrio y la región de los diez barrios. La interculturalidad y la educación familiar comunitaria en los barrios, sus ciclos festivos, los sistemas de organización que responden a la cosmovisión de la tradición religiosa mesoamericana y cristiana. Cholula por ser uno de los pueblos originarios de la Cuenca de México caracterizado territorialmente entre lo urbano y rural, lo contemporáneo y lo tradicional, conserva su identidad a través de los diez barrios. Sus ciclos festivos, organización social a través del sistema de cargos, relacionado con la recreación de prácticas y creencias religiosas que realizan a través de concepciones, ideas y creencias, prácticas y rituales que se vinculan con la tradición mesoamericana religiosa y el cristianismo.
Por lo tanto, los barrios de Cholula tienen un papel fundamental para conservar viva la ciudad milenaria. Muy complejo para muchos investigadores y residentes cholultecas, que perciben una ciudad compleja culturalmente milenaria sobre la presencia del mundo prehispánico que pudo combinarse con la europea a través del cristianismo. Sin embargo, es una ciudad que no ha perdido el núcleo duro de su cosmovisión, que se expresa en ritualidad y religiosidad presente para fortalecer la identidad, el simbolismo del ser y estar como individuo en lo colectivo, ocupando un territorio, participando, construyendo anualmente a nivel comunitario y de la región de los barrios, así como para lograr su reconocimiento, derechos, respeto a sus tradiciones en una Cholula moderna. Una constante construcción identitaria en la vida cotidiana de los barrios compleja para extraños y normal para los portadores de la tradición oral de los barrios.
La tradición es la parte importante que conserva viva a la ciudad milenaria y sagrada de Cholula, sin embargo, diversas amenazas conducen a su perdida, entre las que destacan la otra Cholula, la población que es parte de un sistema de cargos de tradición o religiosidad, las autoridades religiosas que desconocen totalmente la cultura cholulteca en particular de los barrios, la parte civil que comercializa. Una pérdida porque la tradición ha sido comprendida en términos de autoritarismo irracional que sin miramientos traduce la experiencia de nuevas generaciones que manifiestan la modernidad, falta de interés de conocer el significado de cada festividad, poder o política, falta de respeto hacia las mismas autoridades tradicionales y sus jerarquías, individualismo, falta de la experiencia y marginación y/o exclusión de autoridades tradicionales, entre otras más amenazas que conducen a la pérdida total de la tradición y principalmente su valor y significado. Sin pensar e imaginar que una tradición es como las Escrituras, que su valor no radica en lo material, sino que son testimonio de memoria y comunicación mediante la transmisión oral. Que para los portadores de la tradición oral de mayor edad y tiempo de haber realizado un cargo o mayordomía tiene un significado espiritual y sagrado al igual que las Escrituras porque son recibidas con el mismo aprecio, valoración y veneración, aun cuando exista modernidad, lo que posibilita la continuidad social y cultural, porque saben que la tradición se puede adaptar, pudiendo incluso facilitar el proceso de transmisión hacia la misma, al mismo tiempo que puede revitalizar las tradiciones.
Hablar de tradiciones en Cholula significa valores de identidad, educación, legado histórico con la participación comunitaria cultural, con sensibilidad y sentimiento de pertenencia. La finalidad, la transmisión y reproducción de la tradición es la perdurabilidad de las manifestaciones culturales religiosas, de su constante desarrollo, proceso de asimilación, renovación, su vigencia, significado y función.
