Diario Sin Secretos
El helicóptero “Agusta” modelo A109, que se desplomó ayer, causando la muerte de la gobernadora Martha Erika Alonso, del senador Rafael Moreno Valle, su asistente y los dos pilotos, por sus características era imbatible, y casi imposible de caer a tierra, de acuerdo a las características que se presenta la empresa constructora.
El helicóptero “Agusta” modelo A 109, contaba con certificado de aeronavilidad otorgado el pasado 21 de septiembre de 2018, con vencimiento al 29 de septiembre del 2020.
Es una aeronave de última generación, de tipo militar, técnicamente imbatible en el aire, tiene turbinas de relevo para poder planear sin hélices, no cae fácilmente a tierra.
Sin haberse iniciado la investigación, Alfonso Durazo Montaño, Secretario de Seguridad Pública Federal, descartó sabotaje en el desplome del helicóptero “Agusta” Modelo A 109, donde perdieran la vida la gobernadora Martha Erika Alonso, el senador Rafael Moreno Valle, su asistente y los dos pilotos de la aeronave.
El funcionario federal, estimó que todo indicaba que fue una causa atribuible al funcionamiento del equipo de la nave.
En tanto que Alejandro Gertz Manero, encargado de despacho de la Procuraduría General de la República, dijo que la torre de control del aeropuerto de Huejotzingo, tomó conocimiento del despegue y 10 minutos más tarde se perdió la comunicación, y no se tiene mayor información.
En la conferencia de prensa que funcionarios federales ofrecieron anoche por el trágico suceso, señalaron que el helicóptero era rentado y pertenecía a la empresa privada Servicios Aéreos del Altiplano S.A. de C.V., cuyo centro de operaciones se encuentra en el Aeropuerto Internacional Hermanos Serdán, de Huejotzingo.
Durazo Montaño detalló que el helicóptero se desplomó a 3 millas nauticas del aeropuerto “Hermanos Serdán”. El hecho se registró a las 14.40 horas.
La investigación corre a cargo de la Procuraduría General de la República PGR-, que inició la carpeta respectiva, y serán las autoridades de aeronáutica de la SCT, así como los fabricantes de la nave Augusta y Pratt & Whitney.
El lugar se mantiene acordonado por miembros del Ejército Mexicano.