Libre Expresión / José Antonio Cuéllar
La tragedia registrada en el estadio “La Corregidora”, en Querétaro el pasado sábado 5, ha conmocionado a la sociedad mexicana y en varias partes del mundo, a dónde ha llegado la noticia de los hechos violentos, y la exigencia social expresada a través de las redes sociales es que no debe repetirse.
Y eso exige un compromiso de autoridades, empresarios y aficionados del fútbol.
Llama la atención que mientras el gobernador de Querétaro Mauricio Kuri, a unas horas de acontecido los hechos violentos, señaló:»Aunque no haya muertos es una tragedia. No podemos permitir que se politice. Es muy lamentable que se desinforme..”.
Sin embargo, aficionados que difundieron videos y fotografías de los hechos muestran que no es así, y se suman los testimonios de que hay desaparecidos.
En los videos y fotografías se muestran cuerpos desnudos y ensangrentados, y gente que tenia armas punzo cortantes, palos y sillas.
En uno de los video se aprecia dos escenas escalofriantes, una en donde un guardia de seguridad abre la puerta de uno de los pasillos del estadio para que pasara la estampida de aficionados con actitud violenta; y otra, en donde un policía con toda la calma e indiferente a los hechos hace una llamada telefónica.
Otra de las observaciones, es que la violencia no se focalizó en una parte del estadio, sino que se generalizó en el campo, gradas, pasillos, y hasta afuera del estadio.
Pero el mandatario de esa entidad, dijo: «Circularon fotos de personas supuestamente fallecidas. Fueron identificados en el hospital y están graves de salud. Los pacientes graves, todos están estables con una vigilancia continúa y estrecha”.
Su compromiso fue hablar con la verdad y ahondar en las investigaciones a través de la Fiscalía.
La carpeta de investigación abierta es por por los delitos de homicidio en grado de tentativa, violencia en espectáculos deportivos, posible apología del delito, asociación delictuosa y delitos cometidos por servidores públicos.
Horas más tarde, en comunicado, el gobierno dio a conocer que fueron suspendidos de sus funciones el director de Operación Policial,Leonardo Flores Mata; el encargado de la Unidad de Campo, Isaac Pérez Infante; Agustín Martínez Ortiz, policía, y Carlos Mendoza Martínez, coordinador de Eventos y comisionado para el partido del 5 de marzo, fueron los suspendidos.
Las primeras informaciones hablaban de por lo menos 17 muertos, y decenas de heridos, pero el gobernador lo negó en todo momento, y solo aceptó que había 26 heridos.
Los hechos obligan revisar la normatividad en que deben ajustarse los empresarios que deben garantizar la seguridad de los asistentes a los eventos; debe haber mejor policía y la revisión de asistentes al evento para evitar que se introduzcan armas; regular la venta y consumo de alcohol.
La sociedad exige el esclarecimiento de los hechos y el castigo a los culpables. La violencia no debe normalizarse, sino debe frenarse por el bien de todos.