Palacio Nacional.- El asesinato de dos sacerdotes jesuitas, en una Iglesia de la Sierra Tarahumara, en Chihuahua, llegó a la mesa de seguridad que encabezó el presidente Andrés Manuel López Obrador, quien informó que su gobierno ha iniciado las investigaciones.
Aseguró que ya se tiene información de los presuntos responsables, y reconoció que la zona donde aconteció el hecho violento hay presencia del crimen organizado.
“Aprovecho para decir que tenemos información ayer por la tarde-noche, de unos asesinatos en Urique, al parecer de dos sacerdotes jesuitas. La información que tenemos hasta ahora, hasta las 5:00 de la mañana, es que entraron a la iglesia de Urique, persiguiendo a una persona, lo asesinaron, salieron los sacerdotes y al parecer, también ellos fueron asesinados, estamos ahora ateniendo este asesinato”, expuso el mandatario federal.
“Urique está en la sierra de Chihuahua, de Creel hacía adelante, por Temoris, por Chínipas; es una zona de bastante presencia de la delincuencia organizada, parece que se tiene ya información sobre los posibles responsables de estos crímenes”, dijo el presidente.
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