Sin Límites
Por Raúl Torres Salmerón
*Hay una base amplia en la entidad, pero ha sido maltratada y despreciada, dice el político
Don Melitón Morales Sánchez, es un político poblano miembro del PRI, estudioso de la política poblana, fue diputado local y federal. Fungió como dirigente estatal tricolor en el sexenio de don Alfredo Toxqui Fernández de Lara. En tiempos del gobernador Melquiades Morales fue dirigente de la Liga de Comunidades Agrarias y Sindicatos Campesinos de la CNC en Puebla.
Ha ocupado diversos puestos en los gobiernos estatales y ha sido delegado del PRI en varios estados de la República. En entrevista en el restaurante Los Agaves, acompañado de quien esto escribe y los periodistas Mauro González Rivera y Gabriel Sánchez Andraca, analiza la candidatura del PRI de Alberto Jiménez Merino al Gobierno del Estado y señala lo siguiente:
-Creo que el PRI y su candidato al Gobierno del Estado, están en condiciones de alcanzar el triunfo en la con tienda electoral.
-Lo anterior porque pienso que en el Estado de Puebla existe de manera real una militancia tricolor muy amplia y leal, pero está olvidada y maltratada por los grupos beneficiarios que en los últimos tiempos se apropiaron de la dirección poblana del PRI.
-Esta militancia no fue atendida ni procurada y sus dirigentes municipales y sus representantes eran mal recibidos en el Comité Directivo Estatal y a veces ni siquiera fueron recibidos.
-Pero eso sí, a los hora de los apuros electorales, los candidatos o sus representantes, buscan afanosamente a los líderes que en sus pueblos y comunidades, son con limpieza, los señores de la actividad política.
-Desafortunadamente ya no responden con el mismo entusiasmo porque cuando buscaron ser escuchados, no fueron tratados con dignidad. Si existe la militancia y las dirigencias locales, pero han sido maltratados y despreciados.
Interrogado sobre las actuales campañas de los partidos participantes en la elección extraordinaria para Gobernador del Estado y en especial la de su partido el PRI, Don Melitón Morales expresó:
-Lo digo con respeto, que las tres campañas deben tener mejor sabor y mayor aliento. Las veo desdibujadas.
-La política y sobre todo la política electoral es de intensas emociones, evitando los desbordamientos agraviantes para no atentar contra la estabilidad social del Estado.
-Pienso que el candidato del PRI debe mejorar y fortalecer se programa de comunicación con los medios y sobre todo con la sociedad a la que legítimamente aspira a gobernar.
–Debe tener claridad, lógica política, efectivo sentido social, programa económico y fundamentalmente el compromiso declarado con el estado de derecho que significa que la ley debe sancionar a todos en asuntos de procedencia.
-Sancionar a todos significa a gobernados y también a gobernantes. De manera relevante, la ley debe proteger a todos como manda la Constitución, sin distingos de religión, definición política, situación racial y otro tipo de preferencias.
-No dudo que el candidato a gobernador del PRI tiene la convicción de fortalecer la alianza de campesinos e indígenas, obreros y clases medias, con empresarios, comerciantes, industriales, etc.
-El dinero, por sí mismo, no produce bienes ni servicios, para que regrese como parte del esfuerzo diario de los trabajadores, del trabajo de hombres y mujeres, requiere de los inversionistas para la creación de fuentes de trabajo.
-El candidato del PRI, tiene que dejar en cada discurso dirigido a científicos, intelectuales, investigadores, campesinos y obreros, verdaderos trozos del alma cívica contenida en los documentos básicos del PRI.
Hasta aquí el diagnóstico de la actual etapa electoral del ex dirigente partidista.
En fin, como escribió Manuel Machado (España, 1874-1947), en sus Dolientes Madrigales:
Estoy muy mal… Sonrío
porque el desprecio del dolor me asiste,
porque aún miro lo bello en torno mío,
y… por lo triste que es el estar triste.
16 años cuestionándolo todo, investigación y crítica política sin censura.