DiarioSinSecretos.com / Angélica García Muñoz
Ciudad de Puebla.- El gobernador Miguel Barbosa Huerta, dio a conocer que se realiza un proyecto para reabrir los «Lavaderos de Almoloya»-una joya de la ciudad- tras detectarse fallas en su estructura ocasionada por el desprendimiento de material de los muros.
Para salvaguardar la integridad y seguridad de losvisitantes, así como de los conductores de vehículos que circulan por la zona, el Gobierno del Estado, con el aval del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), determinó cerrar al público el espacio subterráneo ubicado debajo de los «Lavaderos de Almoloya», que ha registrado un importante deterioro debido a que realmente esta estructura es un drenaje del siglo XVI.
El mandatario estatal, explicó que las empresas privadas que estaban apoderadas de esta zona histórica, intervinieron recientemente este drenaje para convertirlo en un túnel, con estructuras endebles, trabajos que dañaron la bóveda del lugar que cruza por debajo de Los Lavaderos.
Por lo tanto, a través del arquitecto Alberto Miranda, se trabaja en un proyecto de estructuración que tendrá que ser validado por el INAH.
El especialista expuso que desde que se abrieron al público los «Lavaderos de Almoloya» empezaron a tomarse medidas de seguridad, luego de mencionar que el cierre derivó del desprendimiento de material de los muros de esta estructura.
Presenta INAH resultados del dictamen de la zona
En la conferencia matutina del Gobernador Miguel Barbosa, estuvieron el delegado del INAH en Puebla, Manuel Villarruel Vázquez, y el supervisor del Centro INAH, José Abundio Enrique Gómez, que explicaron que este sitio subterráneo registra un problema de inestabilidad por escurrimientos de agua y por ende la pérdida de tierra.
El primero de ellos celebró la recuperación de sitios históricos por parte del gobierno estatal, al considerar esta acción como un acto de justicia. Señaló que el INAH apoyará a la gestión de Puebla en este proceso de reapertura de los espacios recuperados en favor de la sociedad.
En tanto, el director de Bienes Muebles e Inmuebles, Igor Emilio Ferrer Acuña, precisó que una de las capillas que fue construida por los privados cerca del espacio subterráneo, era realmente una cisterna, por lo que naturalmente el agua invade la estructura, que implica también un riesgo por la electricidad que le fue colocada.