Libre Expresión / José Antonio Cuéllar M.
No es secreto que el Alcalde panista Eduardo Rivera Pérez, trabaja todos los días en busca de la candidatura estatal con miras a alcanzar la gubernatura en el 2024.
Así lo decía el finado gobernador Miguel Barbosa Huerta, y hoy se sigue comentando en las oficinas del Palacio Municipal, desde donde se promueve una campaña de imagen costosísima en favor del edil panista. Cientos de millones de pesos destinados para este 2023.
Barbosa, decía en sus conferencias matutinas que le recomendaba a Eduardo Rivera- que consideraba su amigo- que no le hiciera caso a “Yunquelandia”, refiriéndose de manera despectiva a la Organización del Yunque, agrupación cívica-política, reservada, que por décadas ha presumido mantener relaciones con la jerarquía eclesiástica de nuestro querido México.
El Yunque, actúa a través de los organismos empresariales y patronales, y en algunas universidades, y que en acuerdos cupulares decidieron respaldar a Eduardo Rivera, en su proyecto político.
Como parte de una estrategia que la reditúe simpatías, Eduardo Rivera – aunque aún no es candidato- ha emprendido acciones en busca de ganar simpatías haciendo creer a la sociedad de que comulga con la causa de los católicos, al emprender trabajos de embellecimiento del exterior de la Catedral; otorgar permisos para le vendimia de alimentos afuera de los templos en las fiestas patronales; y presentarse como uno de los organizadores de la próxima «Procesión del Silencio» en Semana Santa. En el fondo puro pragmatismo, que caracteriza a los políticos de hoy día.
Llama la atención que el pasado Martes 21 de febrero, se congregaron en el campo de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla- UPAEP- el rector Emilio José Baños Ardavín; el arzobispo Víctor Sánchez Espinosa, en la Sala Universitaria “Francisco de Vitoria”, a la cual llegó el edil Eduardo Rivera Pérez – vestido de saco y camisa oscuros; y pantalón crema- y listo para tomar el micrófono y posar para las fotos.
El motivo fue dar a conocer la Marcha del Silencio 2023, en su edición número 31, evento que encierra una religiosidad popular de nuestro pueblo católico, y que en años pasados logró reunir a más de 160 mil asistentes, y que por la pandemia por la Covid-19, el evento fue suspendido, y cuando se reinicio en el 2022, captó poco más de 100 mil almas.
Históricamente, la organización del evento ha corrido a cargo de un grupo de universitarios, religiosas y gente piadosa de las diferentes cofradías, que promueven la fe religiosa a través de la devoción a imágenes muy valoradas por los fieles que las pasean por las principales calles del Centro Histórico, el Viernes Santo, donde se hacen reflexiones y culmina con las 7 palabras de Jesús, en la Catedral de Puebla, con reflexiones del arzobispo Víctor Sánchez Espinosa.
Los movimientos laicales están en sintonía con la Arquidiócesis de Puebla, a través de un Consejo que aglutina a más de una treintena de apostolados de seglares que sustentan la estructura del evento, y mantienen esta bella tradición de Semana Santa.
Tradicionalmente, los anuncios de cada año para la “Procesión del Silencio”, eran dados por el historiador Eduardo Merlo, por Jesús Castro, de la Cofradía Universitaria de la UPAEP; y sacerdotes, pero este año se les hizo a un lado y en forma protagónica el alcalde Eduardo Rivera Pérez, colocó en el escenario un póster con la Leyenda “Contigo y con Rumbo” que es del lema de su gobierno pero que nada tiene que ver con el evento religioso.
Momentos en que fue captado el Arzobispo Víctor Sánchez, no ocultó su molestia, pero Eduardo Rivera, aprovechó el momento para mostrar su mejor sonrisa ante las cámaras de video y fotográficas, material que más tardes fue recomendado para destacarse en los medios de comunicación, como parte de los acuerdos de publicidad que tiene el Ayuntamiento con la prensa.
El Papa Francisco, señaló en audiencia del pasado miércoles 22, que la Iglesia Católica no es un partido político, ni puede ser considerada como tal, y advirtió que aquellos que se refugian “en una idea, en una ideología, sea de derecha, de izquierda, o de centro, están haciendo del Evangelio un partido político, una ideología, un club de gente”.
“En la Iglesia -explicó-, todo debe ser conforme a las exigencias del anuncio del Evangelio; no a las opiniones de los conservadores o los progresistas, sino al hecho de que Jesús llegue a la vida de las personas”.
En esta línea, expuso que “toda elección, uso, estructura y tradición debe ser evaluada en la medida en que favorezca el anuncio de Cristo”.
¿En qué favorece el protagonismo del alcalde Eduardo Rivera Pérez, al anuncio del Evangelio? En nada creo yo, y el Pueblo Católico merece respeto.
