DiarioSinSecretos.com / Angélica García Muñoz
Ciudad de Puebla.- Con el encendido de la primera vela de la Corona de Adviento, de manos del Arzobispo Víctor Sánchez Espinosa, se inicia para el pueblo católico el nuevo año litúrgico y el tiempo para esperar el nacimiento del Niño Dios, en el pesebre de Belem.
De ahí que el líder de la grey católica, exhortó a los fieles a prepararse y abrir su corazón en este tiempo en que la violencia azota a la sociedad, y decidirse a trabajar conjuntamente para rescatar los valores cristianos, y contrarrestar así la violencia, la inseguridad, la criminalidad y feminicidios.
Monseñor Víctor Sánchez, señalo que es necesario tomar conciencia del momento en que se vive, y se decida uno a buscar a Jesucristo haciendo nuestros los valores cristianos y mantener una fe y esperanzas viva en Dios.
“Vivamos de manera honesta, nada de borracheras, nada de lujurias ni desenfrenos, nada de pleitos, nada de envidias”, explicó.
Significado de la Corona de Adviento
El Adviento es una etapa litúrgica de preparación para la Navidad y la segunda venida de Nuestro Señor. Durante estas semanas los católicos decoran sus templos y hogares con una corona circular compuesta por ramas, velas y otros elementos.
Este es el significado de todas las partes de la Corona de Adviento.
La forma circular
Para representar el “amor de Dios que es eterno, sin principio y sin fin”. El círculo nos muestra que nuestro amor a Dios y al prójimo nunca debe terminar.
Las ramas verdes
Las ramas verdes nacen del pino, que significa la inmortalidad, pues “mientras todos los árboles pierden su color y su follaje durante el invierno, el pino mantiene siempre sus ramas verdes”.
El verde también es un color de esperanza y vida. Dios quiere que esperemos su gracia, el perdón de los pecados y la gloria eterna al final de nuestras vidas.
Las cuatro velas
Hay tres velas moradas y una rosada. Estas velas representan los cuatro domingos de los que se compone el Tiempo de Adviento, las tres primeras de color morado se encienden el primer, segundo y cuarto domingo de Adviento, mientras que la rosada se enciende el tercer domingo de Adviento, llamado como el domingo Gaudete.
Las velas representan que Cristo es la luz del mundo, que nos ayuda acompañándonos en medio del dolor y las tristezas, eliminando el frío que provoca el pecado.
Después de la primera caída del hombre, Dios fue dando poco a poco una esperanza de salvación que iluminó todo el universo como las velas en la corona. Así como los siglos se fueron iluminando con la cada vez más cercana llegada de Cristo a nuestro mundo, las tinieblas se disipan con cada vela que encendemos”.
No hay un color específico para las velas, pero se acostumbra a usar el morado, color que usa la Iglesia en Adviento y en Cuaresma como signo de conversión, arrepentimiento y penitencia.
Las manzanas rojas que adornan la corona
Hay corona que muestran frutos o manzanas rojas como una representación de los frutos del jardín del Edén con Adán y Eva que trajeron el pecado al mundo, pero recibieron también la promesa del Salvador.
Las campanas pueden ser otro adorno, “que representan la espera activa del cristiano a la venida de Nuestro Señor.
El listón rojo
Hay coronas que cuentan con un listón rojo que representa nuestro amor a Dios y el amor de Dios que nos envuelve, o bien la demostración del amor del Señor en la Cruz, siendo la alegría que nos trae el Salvador.
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